La zona norte del Departamento Tinogasta enfrenta una situación crítica debido a los fuertes vientos que azotan la región, provocando la caída de árboles, columnas y una visibilidad nula en las rutas. En este contexto, docentes de distintas localidades alzan la voz en medio de la incertidumbre y el temor, solicitando un pronunciamiento oficial del Ministerio de Educación de la Provincia sobre la realización de los actos de fin de clases previstos para la tarde-noche de este miércoles 18.
La disposición, emitida por la Supervisora de la Zona Norte, obliga a los educadores a trasladarse en condiciones de extremo peligro hacia sus lugares de trabajo. Sin embargo, la funcionaria no reside en la región y, aparentemente, desconoce la magnitud de la problemática climática que afecta la seguridad de las rutas y la movilidad en toda la zona.
“Viajar en estas condiciones es poner nuestras vidas en riesgo. No podemos exponernos cuando la situación claramente no es segura”, expresaron preocupados algunos docentes que hicieron llegar sus inquietudes a los medios.
La comunidad educativa permanece en alerta, a la espera de una respuesta urgente de las autoridades del Ministerio, organismo superior que debería priorizar la seguridad de los educadores y estudiantes. Por ahora, el silencio oficial amplifica la angustia y la sensación de desamparo.
Mientras tanto, los vientos siguen castigando implacablemente la región, dejando en evidencia la necesidad de decisiones responsables y en sintonía con la realidad que atraviesa el norte de Tinogasta.